Necesidad del Pensamiento Computacional en la Educación Peruana

Pensamiento Computacional en la Educación Peruana: Una Oportunidad para el Futuro

En el Perú, hablar de pensamiento computacional todavía suena a ciencia ficción para muchas escuelas, sobre todo en zonas rurales. Sin embargo, esta habilidad que consiste en resolver problemas de manera lógica, creativa y estructurada, tal y como lo haría una computadora resulta ser una de las claves para transformar la educación y preparar a nuestros estudiantes para un mundo digital.

¿Qué tan presente está el pensamiento computacional en las aulas peruanas?

Aunque aún estamos en una etapa inicial, ya se están dando pasos importantes.

• Currículo Nacional (CNEB)

• Plan Nacional de Alfabetización Digital 2021-2026
  

• Programas como “Niñas Digitales Perú” y las Olimpiadas de Robótica

Pero... ¿qué obstáculos enfrenta el Perú? :((

A pesar del avance normativo, existen retos grandes que frenan su implementación efectiva:

• 
  Brecha digital: Muchas escuelas aún no tienen acceso a internet o computadoras, especialmente en regiones rurales y de la selva.

• Falta de capacitación docente: Muchos profesores no han recibido formación en herramientas digitales ni programación.

• Infraestructura limitada: Hay colegios sin laboratorios de cómputo, sin kits de robótica y con materiales obsoletos.

 ¿Por qué es urgente implementarlo?

El pensamiento computacional no solo sirve para programar. Su implementación ayuda a que nuestros estudiantes:

• Piensen con lógica y orden.

• Trabajen mejor en equipo.

• Sean más creativos y resolutivos.

• Conecten el conocimiento teórico con la práctica.

• Se preparen para empleos del futuro, incluso en áreas fuera de la tecnología.

En resumen...

El pensamiento computacional puede ser el motor de una educación más moderna, inclusiva y efectiva. En el Perú ya hay caminos abiertos, pero falta recorrerlos con decisión. Si queremos que nuestros niños y jóvenes no solo consuman tecnología, sino la creen y la transformen, el cambio debe empezar desde hoy y desde las aulas.

Fuente: http://portal.amelica.org/ameli/journal/428/4282629014/